Sobre la cultura ideológica dominante

¿Quién tiene la hegemonía cultural/social? ¿La izquierda o la derecha? Dos tesis contrapuestas

• Ignacio Camacho, analista (ABC, 9-2-12)

"La izquierda ha perdido el poder político, pero no la hegemonía cultural ni la de la opinión pública, cuyo dmonio mantiene en España desde la Transición merced a su potente implantación entre las élites de pensamiento".

• Paolo Flores D´Arcais, filósofo, en El País (1-11-11)

"La derecha puede perder las elecciones pero no entra en crisis (...) porque continúa teniendo el poder"

En un artículo suyo en El País (25-10-09) afirmaba:

"Y es que la crisis provoca incertidumbre ante el futuro y el miedo empuja a las masas hacia la derecha, según se dice. Pero eso ocurre solo porque la socialdemocracia no ha sabido dar respuestas en términos de reformismo, es decir, de justicia social creciente, a la necesidad de seguridad y de "futuro" de esos millones de ciudadanos".

"Al traicionar sistemáticamente su única razón de ser, la socialdemocracia ha estado en crisis incluso cuando ha ganado elecciones y ha gobernado. ¿Cuánto se han reducido las desigualdades sociales bajo los gobiernos de Blair? En nada, si acaso todo lo contrario. ¿Y con Schroeder? ¿De qué puede servir una izquierda que lleva a cabo una política de derechas, si no a preparar el retorno del original?"

Saber más:

• "Desde la caída de la URSS, el capitalismo se ha quedado sin contención"

Ana María Moix, El Mundo (15-9-11)

•  En el libro derecha e izquierda, de Norberto Bobbio distingue entre libertad efectiva y teórica, y apunta una frase que, aunque obvia, se olvida a menudo:
  "Quien se considera de izquierda, de la misma manera que quien se considera de derechas, considera que las dos palabras se refieren a valores positivos"
  
  
     
  Saber aún más: "El monstruo amable" 
  
  

  
  
  

  De una entrevista al filósofo y lingüista Raffael Simone en El Mundo (4-2-12), autor de El monstruo amable. ¿El mundo se vuelve de derechas?

  
  
  

  "Simone, socialista declarado, atribuye el hundimiento de esa ideología a su incapacidad para adaptarse al nuevo paradigma cultural imperante, un monstruo de aspecto afable que se alimenta sobre todo de consumismo, de diversión a toda costa y de la digitalización de las comunicaciones. Los tres principales ingredientes que en su opinión configuran la modernidad (...)"

  
  De una información en Público sobre el mismo libro (4-2-12)
  
  

  "El mito del monstruo amable ha pervertido la definición de bienestar: si antes abrigaba con el bien común, ahora lo hace con el lujo y el ocio. Si antes el bienestar era compartido, ahora es radicalmente individualista".

  
  

  
  

  Sobre su libro (dossier de prensa de la editorial Taurus)