1 de septiembre de 1973. Esta revista española publicó: "Salvar a Chile es salvar a Hispanoamérica".
22 de septiembre. "Chile se salvó".
27 de octubre. Otro artículo, de Ricardo Fuentes Castellanos, titulado "El trágico fin del socialismo", con este cinismo:
"Como
era de esperar, la aventura socialista en Chile tenía que desembocar en
una tragedia sangrienta (...) podemos decir que el golpe militar
chileno ha venido a confirmar con creces lo dicho por José Antonio
Primo de Rivera de que frente al comunismo no hay más argumento que "la
dialéctiva de los puños y las pistolas
En el mismo número el padre Venancio Marcos escribió:
"¿qué
es lo que no hemos leído acerca del alzamiento militar de Chile? Con un
desconocimiento completo de la realidad chilena, pero con evidente odio
a las Fuerzas Armadas y a los buenos chilenos, algunos sacerdotes en
revistas religiosas han hecho un pésimo servicio a la Iglesia".
10 de noviembre. Artículo de Manuel Chacón:
"Lo
que resulta lamentable de veras es que aún no hayamos oído (al menos en
mi caso) un comentario laudatorio, una valiente apología del Ejército".
"ciertamente
que ha corrido la sangre del valeroso pueblo hermano y que hemos de
elevar nuestras oraciones cotidianas por sus muertos, cualquiera que
fuese su ideología; pero hay veces que han de desatarse ríos de sangre
para cegar los que ya corrían plenos de pus, que todo lo infestaban con
su ponzoña".
El articulista elogió el "ejemplar patriotismo de éste", se refirió al "Chile eterno e inmortal" y apuntó:
"Chile ha vuelto a ser Chile, y aunque en él se lucha, también se reza.
Yo
envío desde aquí un abrazo entrañable a los hombres que han permitido
que así sea. Ya sé que ello costará "sangre, sudor y lágrimas", pero
Europa entera aplaudió al que en circunstancias también críticas
pronunciara esa frase como guión de una conducta.
No
en vano decía San Agustín que el patriotismo es el único amor que
merece ser más fuerte que el de los padres, y de ese amor se nutría el
concepto de lo que el Ejército es: decisión jurada y solemne de que la
patria triunfe y no perezca.
Chile, nuestro amado Chile, ha sido salvado esta vez por el Ejército. En España, en este país hermano, sabemos "algo" de eso".
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